Canadá es un importante mercado de servicios. Según UNCTADSTAT, Canadá es el decimocuarto mayor importador de servicios en el mundo. Adicionalmente, Canadá es un importador neto de servicios. En 2019, las importaciones de servicios a Canadá llegaron a un total de $161 mil millones y las exportaciones de servicios $139 mil millones.
Tecnología de la Información
El rápido crecimiento del sector de las tecnologías de la información y comunicaciones (TIC) de Canadá aportó US$94.100 millones y un 4,8% al PIB nacional en 2019. Las proyecciones de 2020 predicen que el sector seguirá creciendo a más de US$99.000 millones para finales de 2022. En 2019, las importaciones de TIC ascendieron a más de US$11.000 millones, creciendo constantemente, año tras año durante más de una década.
A pesar del tremendo impacto económico negativo que la COVID-19 ha tenido en la economía canadiense, el sector de TI se ha mantenido, en su mayor parte, resiliente por una serie de razones. Esto incluye la capacidad del sector de cambiar sus procesos rápida y fácilmente a ubicaciones remotas en comparación con otros sectores, el aumento de la demanda de servicios informáticos catalizado por la pandemia y las consiguientes medidas de distanciamiento social, así como el nuevo énfasis puesto por las empresas en las inversiones en tecnología con el objeto de impulsar la transformación digital en una economía post-COVID.
Turismo
Con muy pocas excepciones, los viajes internacionales de los canadienses han aumentado constantemente año tras año durante más de cincuenta años. En 2019, los residentes canadienses hicieron 12,3 millones de viajes a países distintos de los Estados Unidos, gastando un estimado de US$21,7 mil millones en viajes. De hecho, Canadá ocupa el sexto lugar entre todos los países en gastos de turismo internacional.
La pandemia de la COVID-19 ha tenido un tremendo impacto negativo en el sector turístico mundial. El gasto turístico internacional en Canadá cayó de aproximadamente US$21.000 millones en 2019 a un estimado de US$4.700 millones en 2020.
Industrias Creativas y Culturales
Los canadienses son fuertes consumidores de las industrias creativas y culturales. Cada año, más del 99% de los canadienses participan de alguna manera en la ‘cultura’. Canadá es el país más étnicamente diverso entre los países occidentales modernos. La composición étnica del Canadá repercute no sólo en los hábitos de compra de los inmigrantes recientes y sus hijos, sino también en los de los principales canadienses, ofreciendo amplias oportunidades a los exportadores de servicios de este sector.
En 2018, el último año para el que se dispone de datos, las importaciones de productos culturales (bienes y servicios) ascendieron a US$ 2.900 millones, un aumento de casi 14% desde 2014 y representaron 2,9% de las importaciones totales de Canadá.
La pandemia de la COVID-19 y las medidas de salud pública resultantes han tenido un enorme impacto en las industrias creativas y culturales. Por lo menos a corto plazo, las exportaciones de servicios a Canadá en este sector se verán afectadas por factores como las medidas de distanciamiento social y el tiempo que estas restricciones permanezcan vigentes, así como la capacidad de los exportadores para conectarse con sus audiencias en línea en el ínterim.
Educación
Cuando se trata de programas de estudio en el extranjero, Canadá está por detrás de muchos otros países desarrollados, con sólo el 11% de los estudiantes universitarios canadienses participando en una experiencia internacional durante su diplomado. Sin embargo, el gobierno canadiense ha reconocido recientemente la importancia de las oportunidades de estudio y trabajo en el extranjero y, para apoyar y motivar las iniciativas de estudio en el extranjero, ha lanzado la Estrategia Internacional de Educación (EIE) 2019-2024.
Uno de los tres objetivos fundamentales de la estrategia de la EIE es “motivar a los estudiantes canadienses a adquirir nuevas aptitudes mediante oportunidades de estudio y trabajo en el extranjero en mercados mundiales clave, especialmente en Asia”. Esto ofrece una oportunidad adecuada para que las instituciones de aprendizaje, particularmente las de Asia y América Latina, desarrollen programas e iniciativas de comercialización adaptadas a los estudiantes canadienses que deseen aprovechar el Proyecto Piloto de Movilidad de Estudiantes hacia el Exterior.